El título sigue siendo cosa de cinco a falta de tres carreras para la conclusión del campeonato y ninguno se ha rendido todavía. Incluso Jenson Button, que se encuentra a 31 puntos del líder Mark Webber, afirma que seguirá luchando mientras las matemáticas le dejen sin opciones. "De aquí al final pueden ocurrir muchas cosas", asegura.
El objetivo de los aspirantes a la corona mundial es precisamente concluir todas las carreras, evitar los problemas mecánicos y, a ser posible, estar en el podio. Sin embargo, cada vez surgen más voces que afirman que la gran batalla la van a dirimir Webber y Alonso -empatado en segunda posición con Vettel-, a los que separan 14 puntos. Esta mañana lo afirmó Robert Kubica. "Ellos dos son los mejor situados, pero puedo equivocarme; a veces dos se pelean y el ganador es un tercero", señaló el polaco de Renault.
"En Suzuka tuvimos que estar más a la defensiva", señaló Alonso, "pero en Corea somos optimistas y seremos muy agresivos". Su mensaje fue directo a la yugular de los dos pilotos de Red Bull, que precedieron a Alonso y lograron el doblete en el circuito japonés. En Yeongam nadie sabe exactamente qué se va a encontrar. Los equipos llegan a esta pista con un buen trabajo de simulador pero sin saber cómo responderán los coches cuando pisen el asfalto. "Los entrenamientos del viernes serán orientativos", dijo Alonso. "Rodaremos 50 kilómetros más de lo habitual [en general realizan 250 kilómetros] para conocer los puntos de frenada, descubrir si el coche acepta o no los pianos, ver las diferentes trayectorias y los posibles adelantamientos y, por la tarde, estudiaremos los vídeos de nuestros rivales. Pero el trabajo importante creo que habrá que hacerlo el sábado, cuando el trazado haya cogido ya un poco de grip".
Corea debe aclarar el panorama para las dos últimas carreras y es posible incluso que descarte ya a algún candidato. Pero Alonso intentó quitarse la presión de encima y traspasarla a sus grandes rivales de Red Bull, cuando afirmó: "He pilotado para un nuevo equipo en el que me he sentido integrado desde el primer día. En términos de satisfacción, motivación, conducción de equipo, éste es el mejor año de mi carrera, una gran experiencia. Obviamente, sería bonito ganarlo y eso es lo que espero. Pero si no es así, conservaré bellos recuerdos de esta temporada 2010".
Nadie puede quitarse, sin embargo, la presión. Y cuando le preguntaron a Mark Webber si las discrepancias internas en Red Bull podían desembocar en otro incidente entre sus dos pilotos como el que ya ocurrió en Turquía, el australiano respondió airado: "Eso es lo que quisieran muchos españoles. Pero no ocurrirá. Lo único que debo hacer es seguir haciendo las cosas tan bien como hasta ahora. Si gano las dos próximas carreras todo se habrá decidido".
Red Bull está convencido de que tiene coche para poder ganar las próximas tres carreras. Hoy, McLaren explicó que han mejorado algunas evoluciones que ya comenzaron a probar en Suzuka y que su coche será muy competitivo en Corea. Y Ferrari solo espera mantenerse en la misma línea de las últimas carreras: desde Alemania, Alonso ha ganado tres carreras y ha estado en el podio otras dos veces en cinco grandes premios (se accidentó en Bélgica). "En estas últimas carreras daremos lo mejor de nosotros mismos para intentar llegar al final con opciones al título", señaló Alonso. "Si lo hemos hecho en las últimas cinco carreras, no veo razón para no lograrlo en las tres que quedan", concluyó.
Fuente elpais.com
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